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Con el diputado Aldo Dávila

Guatemala en su cambalache

Llegamos a su oficina en el centro de la Ciudad de Guatemala. Una colmena habitada por varias organizaciones sociales, donde el tránsito es incesante y estridente. En medio del zumbido de diálogos intensos que se cuelan en la sala, la voz de Aldo se eleva con firmeza, al tiempo que hinca el diente en la durísima realidad guatemalteca que tanto lo indigna y enfurece.

Gerardo Iglesias

29 | 06 | 2022

-Cuéntanos sobre esa sumatoria de horrores que están sucediendo aquí.
-Primero un gustazo de verte nuevamente. El apoyo que he tenido de la Rel UITA ha sido enorme. El cariño, el consejo oportuno, las llamadas, eso para mí ha sido importantísimo.

Estamos en una crisis como Guatemala nunca ha tenido, se trata de la peor crisis democrática. Aún durante el conflicto armado interno había pesos y contrapesos, en este momento no hay.

La Corte de Constitucionalidad cooptada, el Tribunal Supremo Electoral cooptado. Las autoridades del Ministerio Público consideradas por la Lista Engels corruptas y antidemocráticas, esa cooptación también se registra en el Congreso y en los medios de comunicación para que no haya voces disonantes.

Nos encontramos en medio de una crisis enorme, aprobando estados de sitio, más represión, más violación de derechos humanos.

Son 27 los jueces y magistrados de este país que han renunciado por la persecución sistemática. La última fue la jueza Erika Aifán, perseguida por el presidente Alejandro Giammattei, el ex director del Centro de Gobierno Miguel Martínez y la fiscal general Consuelo Porras. Y ahora van por el juez Miguel Ángel Gálvez.

En mi caso tengo 11 solicitudes de retiro de antejuicio, que se cayeron por ser casos políticos espurios e ilegítimos, pero la presión está ahí presente.

-¿El Procurador de Derechos Humanos está en la mira también?
-También. Hasta cooptaron la Universidad de San Carlos (USCA) con fraude en las elecciones, perjudicando la candidatura del procurador (Jordán Rodas Andrade). Gerardo, esto es muy serio.

Vamos hacia un aislamiento económico internacional. No van a venir a invertir las empresas. Este es un gobierno improvisado que utilizó la pandemia para enriquecerse, incapaz.

Creímos que los gobiernos de Otto Pérez y Jimmy Morales habían sido los peores, pero este señor −el presidente− vino a destruir la institucionalidad, a cooptar al Estado y a favorecer a sus amigos.

-Añadir que la corrupción es omnipresente y actúa con total impunidad…
-Se revela a todo nivel. Por donde miras hay corrupción. Vinieron desde el exterior para ver lo de la corrupción y los sacaron. Como te decía son 27 los jueces y magistrados que tuvieron que irse del país y ahora viven en el exilio porque fueron valientes intentando investigar.

También hay medios de comunicación que han sufrido amenazas y persecución. A quien se atreve a denunciar, van por él.

-El mensaje es evidente: nada ni nadie detendrá la robadera…
-Exacto. Al dejar a Consuelo Porras como Fiscal General lo que quieren es mayor impunidad. Ella va a perseguir a la oposición política, a los medios de comunicación, a los defensores de derechos humanos y a las organizaciones sociales.

-En este contexto hay que recordar la mordaza dispuesta a las ONG.
-Otro mecanismo que encontraron. La nueva normativa reprime, violenta, vulnera. El 97 por ciento de las ONG no logran terminar de registrarse con estos nuevos formatos y entonces están siendo perseguidas. No están autorizando las personerías jurídicas, no están actualizando juntas directivas, y demás.

Es un claro deterioro de la democracia en nuestro hermoso país. Por favor, mantengan los ojos abiertos, hagan las denuncias por nosotros, estén muy pendientes de Guatemala porque el proceso electoral está a la vuelta y en esta nación se incrementa cada vez más la violencia y el autoritarismo.