Bajo las consignas “No al tarifazo”, “No al FMI”, “No a la reforma laboral y previsional” y “No al ataque de las organizaciones sindicales”, cientos de trabajadores y trabajadoras protestaron ayer en Córdoba.
Centrales sindicales y universitarias suscribieron un documento que La Rel reproduce íntegramente a continuación:
“Hace exactamente 49 años llegaban a esta esquina las columnas de los compañeros mecánicos que, con Elpidio Torres a la cabeza, habían marchado desde Santa Isabel cumpliendo el abandono de tareas que daba comienzo al primer paro activo en la historia del movimiento obrero de Córdoba. En el camino la policía ya había intentado, sin éxito, dispersarlos.
Su llegada al centro de la ciudad marcó el encuentro con los choferes de la UTA que, con Atilio López a la cabeza, habían abandonado sus tareas; con los trabajadores de otros gremios; con los estudiantes que, convocados por Agustín Tosco, estaban en la calle desde temprano, y con todos los cordobeses que se habían sumado, marcando el punto más alto de aquella jornada histórica.
Los dirigentes de ambas CGT habían acordado un planteo conjunto de resistencia a las políticas que imponía la dictadura de Juan Carlos Onganía que iba más allá de las reivindicaciones puntuales sobre salarios o condiciones de trabajo y reclamaba el fin de las políticas económicas que -de la mano de Krieger Vasena y con el libreto de ajuste que dictaba el Fondo Monetario Internacional– pretendía imponer la dictadura.
Unas políticas que para ser viables requerían la permanente y violenta represión de la policía brava contra trabajadores, estudiantes, hombres y mujeres de la cultura y, en suma, contra cualquiera que se expresara en contra del régimen.
Quienes gestaron el Cordobazo planteaban, en definitiva, el fin de la dictadura y el regreso de la democracia en nuestra patria.
Estamos hoy aquí, en primer lugar, para conmemorar aquella jornada y rendir homenaje a los dirigentes gremiales y al pueblo que la hicieron posible.
Pero también para expresar nuestro compromiso de resistencia a las políticas del mismo origen que aquellas de 1969 y que ahora pretenden imponerse desde un gobierno nacional electo democráticamente por la voluntad mayoritaria de los ciudadanos.
Un gobierno que con apelaciones a la voluntad y a la modernidad va modelando una realidad en donde la timba financiera es más importante que la producción y el trabajo.
En donde se endeuda criminalmente al país en forma pavorosa, hipotecando el presente y el futuro de varias generaciones de argentinos, mientras se devalúa sin anestesia nuestra moneda.
En donde las ganancias de los poderosos son más importantes que la suerte que corran los trabajadores formales, los desocupados, los trabajadores de la economía popular, los más pobres y excluidos de nuestro pueblo y los jubilados y pensionados a los que ya se castigó con una escandalosa reforma previsional.
En donde se predica el gradualismo, pero de un solo golpe se exime de impuestos a actividades como la megaminería y se aplica un tarifazo brutal en los servicios públicos.
En donde se alienta la importación indiscriminada que se lleva puestos de trabajo por miles en la actividad privada, mientras que el gobierno nacional cesantea a otros miles de trabajadores en el Estado.
En donde se pretende imponer un tope a los aumentos salariales mientras la inflación desbocada se come a diario su poder adquisitivo; las paritarias dejaron de ser libres y el propio ministro de Trabajo amenaza con no homologar los acuerdos que superen el techo del 15 por ciento.
En donde el único trabajo que crece es el precario y la pobreza lo hace a niveles escandalosos y hasta el pan, alimento básico del Pueblo, se ha convertido en un producto de lujo por el alza incontrolada de su precio.
En donde para consolidar estas políticas se impulsa una Reforma Laboral que busca eliminar los derechos ganados a lo largo de años de lucha y se intenta imponer reformas aparentemente inofensivas pero que tienden a facilitar la precarización masiva de nuevos “trabajadores pobres” con contratos a tiempo parcial y de plazo determinado.
Aquellas conquistas históricas son presentadas como “privilegios insoportables” y se ataca a las organizaciones gremiales y a sus dirigentes a quienes se presenta como delincuentes, mientras encumbrados funcionarios mantienen su riqueza en paraísos fiscales y sin ponerse colorados dicen que no la traen al país por que “no le tienen confianza”.
En donde, después de haber perdido reservas en una corrida de los “mercados amigos” pagando tasas que no se pagan en ningún lugar del mundo y de haber fracasado en el intento de controlar la inflación, se recurre una vez más al Fondo Monetario Internacional para que nos auxilie y por supuesto, nos imponga las condiciones que ya imponía en 1969.
Estas políticas también tienen su expresión en Córdoba.
También aquí el único trabajo estatal que crece en la provincia y en los municipios es el trabajo precario, expresado en planes, becas, pasantías o monotributos, todos de absoluta informalidad, sujetos al solo arbitrio de los funcionarios políticos, en abierta contradicción con la definición del papa Francisco, quien ha calificado al trabajo precario como pecado gravísimo.
Córdoba ostenta el lamentable privilegio de haber sido la primera en modificar un convenio colectivo y en reglamentar el derecho de huelga con leyes provinciales de absoluta inconstitucionalidad.
Frente a esta realidad que nos agrede, las organizaciones que suscribimos este documento decimos “presente” en esta conmemoración del Cordobazo.
Nos hacemos cargo del legado de quienes lo concretaron hace 49 años y asumimos el compromiso de seguir expresando en unidad, solidaridad y organización la resistencia a estas medidas y el trabajo para construir alternativas políticas para que en democracia vuelva a reinar en nuestra patria la justicia social.
Por una sociedad justa, fraterna y solidaria.
No al tarifazo; no al ajuste; no a la reforma laboral; no a la reforma previsional; no al ataque a las organizaciones sindicales; no al Fondo Monetario.
Córdoba, 29 de mayo de 2018
Regionales de CGT de Córdoba, Rio Cuarto, Villa María, Belle Ville, Cruz del Eje, Punilla, San Francisco y Laboulaye – CGT Nacional y Popular – CTA Córdoba – CTA Autónoma – Mesas de Unidad Sindical de Rio Tercero, La Carlota y Huinca Renancó – Confederación de Trabajadores de la Economía Popular – Federación Universitaria de Río Cuarto – Federación de Cooperativas del Sur.
Nota del Editor: El intertítulo es de La Rel