En Guatemala condenan a 80 años de prisión al ex dictador Efraín Ríos Montt, pero la elite empresarial sale al cruce solicitando la anulación del proceso
Con David Morales
¿De Guatemala a Guatemejor?
En Guatemala condenan a 80 años de prisión al ex dictador Efraín Ríos Montt, pero la elite empresarial sale al cruce solicitando la anulación del proceso.
El pasado viernes 10 de mayo, un Tribunal Penal de Guatemala condenó al ex dictador a 50 años de cárcel por genocidio y a otros 30 por crímenes de lesa humanidad en un fallo sin precedentes en el país.
La defensa del exgeneral ha recurrido la sentencia, y la postura del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF), que solicitó al Tribunal Constitucional la anulación del proceso, ha ahondado la polarización social en el país.
La Rel dialogó con David Morales, secretario general de la Federación Sindical de Trabajadores de Alimentación Agroindustriales y Similares (FESTRAS), para conocer su opinión sobre el fallo y saber cuál es el clima que se está viviendo en el país centroamericano.
“La sentencia ha sido un buen precedente, sobre todo teniendo en cuenta que Guatemala ha sufrido una cruenta y larga guerra civil (1960-1996), además de masacres y desapariciones forzadas. Es la primera vez en la historia de América Latina que se condena a un ex presidente por genocidio”, manifestó el dirigente.
Pero hay un punto negativo: la poca certeza jurídica de que se ejecute la sentencia dictada por la jueza Jazmín Barrios. “El tema es complicado -explica-. Se ve con preocupación desde diferentes sectores de la sociedad que se apruebe el recurso de inconstitucionalidad interpuesto por los abogados de Ríos Montt y que es respaldado por el CACIF. De ser así, todo el proceso que llevó a la condena del militar retirado se anulará”.
“Personalmente -prosiguió Morales– considero que si estamos en aras de fortalecer la institucionalidad en Guatemala, algo que nos costó mucho, por cierto, debemos defender el Estado de Derecho, que las instituciones encargadas de impartir justicia sean las que hagan cumplir la ley”.
El dirigente agregó además que no es apropiado que el CACIF opine de inconstitucionalidad de un fallo cuando no maneja los elementos que estuvieron presentes en el juicio y que llevaron a que la jueza Barrios condenara a Ríos Montt por genocidio.
Por otra parte Morales destacó la importancia de que la sentencia obliga también al Estado de Guatemala a pedir perdón al pueblo maya ixiil por las atrocidades perpetradas en su contra. “Es muy importante que se haya ordenado ese pedido de perdón, porque contribuye a que esos hechos atroces no vuelvan a suceder, algo que resume el sentir de la mayoría de los guatemaltecos”, señaló.
“Esperamos que el Tribunal de Constitucionalidad emita sus resoluciones apegadas al derecho y no ceda ante presiones de ningún tipo. Solo de esta forma podremos dar continuidad al proceso de reconciliación en el país”, finalizó Morales.