-El 25 de agosto el sindicato festejó un nuevo aniversario en medio de una manifiesta inestabilidad en el país.
-Desde hace muchos años se presenta aquí una situación de tranzas y de coimas que ha generado nuevos millonarios que no quieren que se les quite los beneficios que han ido adquiriendo sin respaldo popular ninguno.
Lo último que ha sucedido es la decisión del presidente Jimmy Morales de no renovar el mandato de la CICIG, la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, un organismo de Naciones Unidas que ha estado luchando contra las violaciones a los derechos humanos y la corrupción y cuyo presidente, el colombiano Iván Velásquez, ha sido expulsado del país.
-Es el descaro sin límites…
-Exacto. Nosotros lo llamamos dictadura de la corrupción. Nos la quieren imponer, pero no estamos en disposición de aceptarlo.
Lo que tengamos que hacer como pueblo lo vamos a tener que hacer. Ellos quieren mantener sus privilegios y el pueblo ya no lo soporta.
Somos un pueblo con un número muy elevado de personas y niños viviendo en situación de extrema pobreza. Creemos que la corrupción es el cáncer que está matando a este país y que hay que combatirlo de frente.
-Como sindicato han participado en las manifestaciones que se han venido desarrollando contra el gobierno de Jimmy Morales…
-Como Junta Directiva no hemos logrado un consenso, pero solo hemos tenido participación como ciudadanos en algunas marchas, no en nombre del sindicato.
-¿Cómo fue la jornada aniversario del STECSA?
-Muy buena. La celebramos con muchas actividades: una misa, una semana cultural que se extendió desde el domingo 19 de agosto, homenajes a nuestros ocho compañeros mártires.
Hubo jornadas musicales, deportivas, infantiles, teatrales, todo con un mensaje de unidad y solidaridad.