Una buena
El gobierno de Yamandú Orsi dejó sin efecto el contrato que habilitaba el polémico proyecto Neptuno y echó por tierra la idea aprobada por Luis Lacalle Pou, justo en el final de su mandato, de construir una planta potabilizadora de agua del Río de la Plata en el balneario Arazatí, en el departamento de San José.
Víctor Bacchetta – El Zumbido
17 | 7 | 2025

Foto: Gerardo Iglesias
El secretario de la Presidencia de la República, Alejandro Sánchez, y el presidente del ente estatal del agua, OSE, Pablo Ferreri, se reunieron con los representantes del consorcio privado que tenía a su cargo el proyecto y les transmitieron las diferentes obras que esta administración quiere realizar para intentar mejorar el suministro de agua potable del área metropolitana.
El gobierno transmitió la idea de construir una nueva planta potabilizadora en la localidad de Aguas Corrientes, que produzca 200 mil metros cúbicos de agua potable por día, que se sumarían a los 670 mil que produce la actual planta, explicaron a El Zumbido fuentes oficiales.
Además, propuso la construcción de una conexión de tuberías de 40 kilómetros que conecte la nueva usina de tratamiento con los tanques de OSE ubicados en Cuchilla Pereira, cerca de La Paz, en el departamento de Canelones.
Esta propuesta apunta a sustituir el proyecto Neptuno, una mega obra aprobada en el final del mandato de Luis Lacalle Pou, que buscaba construir una planta potabilizadora de agua del Río de la Plata en el balneario Arazatí, en el departamento de San José.
Esta obra iba a estar a cargo del Consorcio Aguas de Montevideo -formado por Saceem, Berkes, Ciemsa y la brasileña Fast Industria e Comércio Ltda- que seguramente se postulará a la licitación de estas nuevas obras anunciadas por el actual Poder Ejecutivo.
A la salida de la reunión, el presidente de la empresa constructora Saceem e integrante del Consorcio Aguas de Montevideo, Alejandro Ruibal, dijo que las conversaciones con el gobierno siguen en un “muy buen ambiente”.
“Estuvimos hablando muy bien, muy profesionalmente, buscando la mejor solución para resolver el abastecimiento de agua potable”, dijo a la prensa y adelantó que los detalles del acuerdo se oficializarán en los próximos días.
De esta forma, se pone fin a las negociaciones para eliminar el proyecto Neptuno, una herencia no deseada del gobierno de Lacalle Pou, explicaron las fuentes.
En este encuentro no se discutió con el pool de empresas privadas la posibilidad de que se encarguen de la construcción de una represa en Casupá -en el departamento de Florida- tal como fue anunciado en campaña electoral y reafirmado al principio de este mandato.
Construir esta represa está en el programa de gobierno del Frente Amplio y fue una de las prioridades de gestión que anunció Orsi.
Para la actual administración la construcción de esta represa es una prioridad, lo que sumado a la creación de una nueva planta potabilizadora de respaldo a la actual de Aguas Corrientes supondrá un mejor abastecimiento de agua potable hasta 2045.
En el gobierno ya tienen todo preparado para comenzar con los estudios de prefactibilidad de la represa de Casupá en las próximas semanas, lo que servirá de puntapié inicial para iniciar los permisos ante el Ministerio de Ambiente, precisaron las fuentes.