La Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas para América Latina (RAPAL Uruguay) está exigiendo del gobierno nacional un mayor control de la sulfluramida, un hormiguicida usado masivamente en el país y en la región.
La iniciativa, que cuenta con el respaldo de la Rel UITA y de otras organizaciones vinculadas a la defensa del ambiente y la salud de las comunidades, pretende sensibilizar a los diferentes organismos estatales para que se pronuncien en contra del uso de este químico en la Novena Conferencia de las Partes del Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes, a celebrarse del 29 de abril al 10 de mayo en Ginebra, Suiza.
La sulfluramida dejó de producirse en Estados Unidos en 2008, y se cancelaron todos los productos registrados desde 2012, pues ha ocasionado problemas ambientales y a la salud de trabajadores y comunidades.
China, un importante productor, consumidor y exportador de sulfluramida, ha anunciado que revocará todas las licencias de producción y uso de sulfluramida este año.
RAPAL alerta que en Uruguay este hormiguicida es comercializado para el control de hormigas de jardín, lo que expone a la población a riesgos que desconoce.