Rastros de petróleo en siete playas, más de un kilómetro y medio de costa afectada y centenares de animales muertos por la contaminación con hidrocarburos no se corresponden con la explicación de las autoridades .

Rastros de petróleo en siete playas, más de un kilómetro y medio de costa afectada y centenares de animales muertos por la contaminación con hidrocarburos no se corresponden con la explicación de las autoridades .
De acuerdo con el científico español Antonio Turiel, la Unión Europea está desistiendo de sus planes de desarrollo del hidrógeno verde como alternativa viable en la lucha por la descarbonización del planeta e irá dejando por el camino los proyectos promovidos en Uruguay y otros países de la región.
El gobierno de Yamandú Orsi dejó sin efecto el contrato que habilitaba el polémico proyecto Neptuno y echó por tierra la idea aprobada por Luis Lacalle Pou, justo en el final de su mandato, de construir una planta potabilizadora de agua del Río de la Plata en el balneario Arazatí, en el departamento de San José.
El consorcio privado infraestructura Arazatí S A rechazó el acuerdo, pero la no comparecencia de la empresa estatal de aguas OSE en la audiencia solicitada por las organizaciones sociales indicó que el nuevo gobierno ha decidido por el momento no pronunciarse a favor o en contra del cuestionado contrato.
Un equipo de aplicación terrestre, conocido popularmente como “mosquito”, roció con productos químicos “a escasos 20 metros” de la institución de enseñanza técnica.
La Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida y el colectivo Los Tucu-Tucu, de San José, presentaron una demanda para que el Poder Judicial declare nulo por inconstitucional el contrato por el proyecto Neptuno-Arazatí firmado entre OSE y el Consorcio Aguas de Montevideo
La justicia uruguaya, a través de una resolución del Tribunal de Apelaciones, dejó el camino libre para que prosiga su marcha el llamado proyecto Neptuno, que avanza hacia la gestión privada del agua potable en Uruguay.
Productores y residentes de San José reclaman al presidente Luis Lacalle Pou que cumpla la palabra empeñada en buscar alternativas a los impactos negativos del proyecto Neptuno, que busca extraer agua del Río de la Plata en esa zona para el abastecimiento de agua potable en la capital y la región metropolitana.
La Justicia uruguaya ordenó precautoriamente al gobierno de Luis Lacalle Pou no firmar el contrato con el consorcio privado Aguas de Montevideo por considerar que existe una seria controversia constitucional y ambiental no resuelta con el Proyecto Neptuno.
Bajo los loables fines de descarbonizar la economía y contener el cambio climático, Uruguay vive una ofensiva inversionista internacional de mayor alcance y consecuencias que la forestación.