A pesar de la violenta represión sufrida desde el comienzo de las movilizaciones sociales contra la reforma tributaria y otras reformas pretendidas por el gobierno de Iván Duque, el pueblo colombiano resiste y no se rinde.

A pesar de la violenta represión sufrida desde el comienzo de las movilizaciones sociales contra la reforma tributaria y otras reformas pretendidas por el gobierno de Iván Duque, el pueblo colombiano resiste y no se rinde.
Una veintena de muertos, al menos 800 heridos y más de 600 detenciones arbitrarias, es el saldo de la excesiva fuerza utilizada por la policía colombiana para reprimir la masiva protesta popular contra una pretendida reforma tributaria.
El retiro del proyecto de reforma tributaria del gobierno de Iván Duque, tras protestas sociales que fueron salvajemente reprimidas, no supondrá el cese de las movilizaciones ni del paro en curso, anunció el Comité Nacional de Paro.
Esta semana la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) finalmente se pronunció ante la denuncia que realizaron en 2019, nueve de los 13 amenazados de muerte por el Comando Barneix en 2017.
Este título no comprende al pueblo paraguayo sino a los partidos hegemónicos de su sistema político que, con la excepción del período de Fernando Lugo (2003-2008), han tenido en sus manos el destino del país: el Partido Liberal, y fundamentalmente, el Partido Colorado, actualmente en el gobierno.
El diputado Aldo Dávila denuncia en el siguiente podcast la profunda crisis democrática que vive su país y la frágil condición institucional.
COVID-19 profundizó nudos de la desigualdad de género en la región con una tasa de desocupación femenina del 22,2 por ciento el año pasado.
El 13 de marzo sindicatos, organizaciones sociales y universidades manifestaron en la capital costarricense contra la ley de Empleo Público que se discute en la Asamblea Legislativa.
Costa Rica vive una confrontación entre el sector político- empresarial y la clase trabajadora, debido a un proyecto de ley sobre empleo público que avanza a galope en el parlamento y que generaría un mayor retroceso en materia de conquistas laborales.
Lo acusan de genocidio por el desmanejo de la pandemia y avisan que las nuevas cepas son un peligro para todos los países que comparten fronteras con el gigante sudamericano. Bolsonaro sigue cuestionando las vacunas.